viernes, 24 de mayo de 2013

Curvas Peligrosas

Las subinspectoras Rebeca Santana y Miriam Vázquez son las principales protagonistas de la novela "Curvas Peligrosas" (2010), de la escritora Susana Hernández. Ver anterior entrada de este mismo blog.

Santana apenas lleva tres semanas en el cuerpo. Forma parte de la Brigada de Homicidios y Desaparecidos. Viste vaqueros oscuros con sello de hipermercado, zapatos de cordones, jersey de lana a tres colores, hecho a mano con más voluntad que maña; y un abrigo de piel girada pasable con piel de borrego en el cuello y los puños. En otra ocasión lleva una sudadera de capucha negra, encima de una camiseta de la Velvet Underground con el famoso plátano de Warhol, tejanos rotos y unas Converse de color caqui. Conduce una Harley-Davidson. Vive en el Raval con Claudia, aunque esta relación está empezando a hacer aguas. Desayuna cafés con ensaimadas. En el Gino´s come unas patatas con salmón y en la Barceloneta una paella. Ve pelis antiguas con su abuelo, como por ejemplo "Guerra y Paz" de King Vidor, o "El Funeral" de Abel Ferrara. Su madre está en la cárcel por un asesinato, una triste y desgraciada historia que ocurrió hace algunos años. Santana se lleva muy mal con su madre. Su vida sentimental está a punto de dar un vuelco cuando conoce a la abogada Malena Montero.

Vázquez es todo lo contrario que Santana. Veterana policía, lleva más de veinte años en el cuerpo. Separada de Marcos, vive con su hija Vero, una joven problemática que está enamorada de un hombre casado. La Vázquez fuma mucho; es adicta a la alta costura y se ha ganado el sobrenombre de "La Marquesa". Tiene unos ojos verdes muy hermosos, rodeados de largas pestañas. Conduce un Lancia. Le gusta el Bourbon. De entrada no se lleva nada bien Santana, de la que piensa que es una JASP, osea Joven Aunque Sobradamente Preparada. De vez en cuando se bebe un chupito de licor de manzana. Acude a un masajista turco que la pone mucho.

Otros agentes de la misma brigada: Pinzón es el comisario, con una enorme barriga. Robles es inspector jefe, en las cenas imita a Raphael, muy delgado al borde de la anorexia. Navarro es el antiguo compañero de Miriam, un tipo la mar de agradable, moreno y apuesto, más cerca de los cincuenta que de los cuarenta, se pone mucha colonia y mastica chicle constantemente, con ramalazos horteras pero vistiendo siempre impecable, con un traje gris oscuro que le sienta extraordinariamente bien.  Crespo es otro poli, al que le huele el aliento. David Bielsa, que va de ligón por la vida. Ramírez, que es toda una leyenda de la científica. Rivas, dibujante del cuerpo. Y luego está la abogada Malena Montero, que está buenísima, que viste un traje de chaqueta gris de corte impecable. Rebeca piensa que tiene doscientos polvos seguidos. Puede ser algo así como un flechazo a primera vista.

Me ha gustado mucho estas "Curvas peligrosas". Una investigación que las subinspectoras Vázquez y Santana van desgranando poco a poco, acumulando pruebas sobre el asesinato de mujeres jóvenes, con problemas de autismo. Todo ello con secuencias de humor, sexo, amor y desamor; y con Barcelona de fondo, el Raval y sus habitantes. Muy recomendable.

Susana Hernández (Barcelona, 1969), además de novela negra, ha escrito "La casa roja" (Premi Ciutat de Sant Adriá, 2005) y "La puta que leía a Jack Kerouac" (Lesrain, 2007). En el año 2009 logró el Premio Versales de poesía lésbica. A quién le guste "Curvas peligrosas" que no deje de leer la siguiente de esta saga, "Contra las cuerdas", que está teniendo un gran éxito y reconocimiento popular.  

3 comentarios:

  1. Qué casualidad, Julio. Estamos coincidiendo en lecturas últimamente. He leído esta novela la semana pasada aunque aún no me he puesto a escribir la reseña. Me gustó mucho, así que he conseguido la segunda de la serie, que me han dicho que es aún mejor. Saludos.

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  2. Lo compré hace unos meses debido al boom de la segunda entrega. Pero ahí sigue en la estantería. Como me pasa casi siempre, otros libros se me adelantan por distintos motivos.
    Tiene buena pinta, y por lo que cuentas la tiene aún mejor. A ver si le ataco pronto porque ya le tengo ganas. :-)

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  3. no me ha gustado nada y rezuma un trasfondo de machismo trasnochado que parece increíble que lo haya escrito una mujer. aburrido además

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