lunes, 9 de noviembre de 2015

La isla tranquila

El inspector Villanueva es uno de los protagonistas de la novela La isla tranquila (2014), de la autora salmantina Mo de la Fuente.

Hernán Villanueva es inspector de policía, trasladado temporalmente a la isla de Tabarca, Alicante. Recuerda mucho a su ex, Blanca. Todavía le cuesta aceptar la decepción, el engaño. Cada mañana su primer pensamiento es ella, maldice el recuerdo de su piel, el olor de su cuerpo, añora su coño humedecido, los pezones duros entre sus dientes ... Extraña su risa y la forma de su cintura entre sus manos mientras bailaban. Villanueva está leyendo un libro de poesías de Benedetti que le regaló Blanca. En un restaurante de la playa se come un caldero, donde se cuece el pescado y con el caldo sobrante se hace un arroz a banda, donde no puede faltar el ali oli.

Otros personajes:

Mónica Esteller ha sido subinspectora de comisaría en Barcelona durante 10 años. Ahora, huyendo de un terrible pasado, está en Tabarca intentando tranquilizarse. De ojos verdes, piel aceitunada, pelo negro en una melena corta. En su casa escucha un CD de Eva Cassidy. Su ex marido Víctor también era policía y tuvieron un hijo, Pau. En un viaje que hace por trabajo a Sevilla se pide unas albóndigas de choco y rape.

Raúl Bru es agente de policía. Moreno, bien esculpido, con un hoyuelo en cada mejilla, la nariz cubierta de pecas y unos ojos que reflejan inocencia y permiten apreciar al crío que fue años atrás. Casado con Raquel, tienen dos hijos, Lydia y Pablo. Le gusta mucho la lasagna que prepara su mujer.

Armando Recio es médico forense, irónico, bajito, algo rechoncho, completamente calvo y con cierto aire afeminado. Viudo, su mujer era una excelente soprano que murió en un accidente de avión.

Silvia Millán es ayudante del forense. Muy delgada, pequeña, con la piel muy blanca. Come como una lima y fuma en pipa con la maña de un viejo marinero.

Ramón es recepcionista en el hotel. "Mitch" es un inglés enamorado de Tabarca, ex profesor con un pasado que trata de olvidar; y Morales, que es un inspector de policía de Sevilla.

Me ha gustado mucho La isla tranquila. Novela negra que va directamente al grano. En una pequeña y preciosa isla de la costa alicantina, Tabarca, donde nunca pasa nada, desaparece una joven. Un inspector es trasladado al lugar, donde se encuentra con una subinspectora que lleva tiempo retirada de su cargo. Los dos tienen un pasado nada agradable, mucho peor el de ella. Trama muy bien llevada, casi sin pistas hasta el final. Un buen desenlace que no te puedes ni imaginar. Me lo he pasado muy bien leyéndola, en dos o tres sentadas, no podía dejar de saber qué derroteros seguía la investigación. Bien retratados los personajes centrales con sus neuras, miedos y sentimientos encontrados. Lo dicho, una novela muy recomendable con una escritura ágil y directa.

Mo de la Fuente es de Salamanca, en cuya universidad estudió. También estuvo un tiempo en la de Westminster de Londres. Licenciada en Traducción e Interpretación y en Comunicación Audiovisual. Además de La isla tranquila, tiene otras dos novelas más publicadas, Ojalá Paula (2014) y Los pobres siempre andamos mirando al suelo (2015).



1 comentario:

  1. No la conocía y parece interesante, así que la apunto para próximas lecturas. Saludos, Julio

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